Cómo obtener una tarjeta de la biblioteca

No es más que otra pieza de plástico. Una tarjeta de biblioteca es fácil de conseguir, y que le permite tomar prestado libros, revistas, discos compactos y videos de forma gratuita.

Busque en la guía telefónica o llame a su biblioteca local para averiguar cuándo está abierto.

Tome dos documentos de identificación con usted a la biblioteca, hay que tener una identificación con fotografía (licencia de conducir, identificación militar o estudiante identificación con foto) y el otro debe presentar prueba de residencia. Una tarjeta de registro de votantes, un cheque con su nombre y dirección impresa en ella, o una factura de servicios públicos se aceptan como prueba de residencia.

Vaya al mostrador de préstamo y pedir una solicitud.

Pídale al bibliotecario sobre las políticas de préstamos de la biblioteca, incluidos los períodos de préstamo, multas atrasadas y renovaciones de libros.

Llene la solicitud y envíela al escritorio de circulación. Si usted es un residente de la zona, su tarjeta de la biblioteca será libre; no residentes pueden obtener una tarjeta para una pequeña cuota anual, por lo general entre $ 10 y $ 25.

Gracias al bibliotecario después de que él o ella procesa su solicitud y manos que tu propia tarjeta de biblioteca!

Consejos y advertencias

La mayoría de las bibliotecas ofrecen tarjetas a los niños si los padres es con ellos cuando sean aplicables. El padre de familia debe firmar la solicitud y será responsable de acatar las políticas de la biblioteca en nombre del niño. Algunas bibliotecas requieren que el niño sea capaz de escribir su propio nombre y apellido antes de que el niño recibirá una tarjeta.

En algunas ciudades se puede aplicar para una tarjeta de la biblioteca en línea. Algunas bibliotecas enviar la tarjeta a usted, pero usted puede tener que recogerlo en la biblioteca en persona.

Si su tarjeta de la biblioteca se pierde o es robado, usted debe notificar a la biblioteca, o usted será responsable de los cargos en contra de su tarjeta. Bibliotecas cobran una cuota de reemplazo pequeño para tarjetas perdidas.